Friday 6 November 2015

A one-day visit to Tarimela for the Tholi Ekadasi Festival.

English:

A one-day visit to Tarimela for the Tholi Ekadasi Festival. 

To Seshu, with all my love and gratitude. Thank you for that wonderful and enjoyable day.

Before I start writing about some of the adventures that have taken place in India lately, I'd like to apologise for not having written anything here in almost two months. The thing is, that my daily routine in India is quite packed and the last thing I want to do when I get to my room is keep writing - either in my blog, in my notebook or elsewhere. I know there are some people who check my blog every day, hoping to find new information, and what you discover is the same information I posted two months ago, already bored to death, occupying the top spot on my list of publications. I refuse to commit to publish something new every day because I know I can not keep this promise, but I promise to update my blog as soon as possible, both for you (I know you want to know about me) and for myself, because I don't want to to have too much information to include in the upcoming months. I think it's best to keep my blog updated, because now I already have too many outstanding publications. Let's see if I achieve it ...

I'd like to continue, then, with the information from another of my adventures in India, an adventure that happened on July 27th and which was held in the house of one of my students, Seshu. The adventure began with my first bus ride in India - a bus which was quite old, with people who had to travel standing, with oxide in any metal corner and broken seats due to the use people have made of them. Although being a bumpy ride, with breaks every few minutes because of the poor condition of the asphalt on highways and roads, and lots of noise (either by the horn of the bus itself or any other car, bike or rickshaw that happened to be on the street at that time), the bus ride turned out to be a very funny experience, with laughter included, that left nobody indifferent.

Once we had reached Seshu's village, called Tarimela, we took the rickshaw, driven by one of his relatives, that took us to his place, where his entire family was waiting for us with open arms - and with a plate of a spicy snack which is very consumed in this part of India and which is accompanied by an also typical sweet to ease the stinging sensation on your tongue after its consumption.

We thereupon returned to the rickshaw and, under the watchful eye of many people who were going to a temple, so did we. The temple is called Chennakesava Swamy and, despite not being very high, it offers spectacular views of the famous Indian sunsets. Due to the spectacular views and the friendliness of all the people who went to the temple with us, that was an amazing experience, worthy of being repeated and never forgotten.

After coming down from the temple, we went to Krishna's place, another one of my students, and we also met his lovely family. All of them greeted us on the front porch of his house and got ready to be photographed with us.

Finally, we went back to Seshu's house, where a delicious (and spicy) dish of pappu (lentils or dal) expected us to be consumed with rice immediately. The food was delicious and the company was virtually unbeatable. After eating and having a few laughs together, we went out on the porch to be photographed again, this time with Seshu's wonderful family and friends.

To end the day, we took the bus and rickshaw again and returned to our reality, Anantapur, but not before laughing out loud again on the bus, sharing the feelings of the nice day we had had and thanking both Seshu and his family for what they had done for us that day. Thank you very much, Seshu, to make that day unforgettable, for joining us in each of our experiences in your village, for treating us so well, for the delicious food and for everything you did on that day in your village that will accompany us to Spain. I assure you that we will never forget any of it.

Castellano / Spanish:


Una visita de un día a Tarimela para el Festival Tholi Ekadasi.

Para Seshu, con todo mi cariño y agradecimiento. 
Gracias por ese maravilloso y agradable día.

Antes de empezar a escribir sobre algunas de las aventuras que han tenido lugar en la India recientemente, me gustaría pedir disculpas por no haber escrito nada aquí en casi dos meses. La verdad es que mi día a día está tan lleno, que la última cosa que me apetece al llegar a mi habitación es seguir escribiendo - sea en mi blog, en mi cuaderno de viaje o en cualquier otro lugar. Sé que hay gente que revisa mi blog a diario, esperando encontrar nueva información, y lo que descubre es la misma información de hace dos meses, muerta de aburrimiento ya, ocupando la primera posición en mi lista de publicaciones. Me niego a comprometerme a publicar algo nuevo cada día porque sé que no podré cumplirlo, pero prometo actualizar mi blog lo antes posible, tanto para vosotras y vosotros (sé que tenéis ganas de saber de mí) como para mí misma, para no tener demasiada información para incluir en los próximos meses. Creo que lo mejor es llevar este blog al día, ya que ahora tengo demasiadas publicaciones pendientes. A ver si lo consigo...

Continúo, pues, con la información de otra de mis aventuras en la India, una aventura que ocurrió el 27 de julio y que tuvo lugar nada más y nada menos que en casa de uno de mis alumnos, Seshu. La aventura comenzó con mi primer trayecto en autobús en la India - un autobús más viejo que nuevo, con gente que tenía que viajar de pie, óxido en cualquier rincón que fuera de metal y con asientos desgarrados por el uso. A pesar de ser un trayecto movidito, con saltos cada dos por tres por el mal estado del asfalto en las carreteras y en los caminos, y mucho ruido (ya fuera por el claxon del propio bus o el de cualquier otro coche, moto o rickshaw que hubiera por la calle), el trayecto en bus resultó ser una experiencia de lo más divertida, con carcajadas incluidas, que no dejó indiferente a ninguno de los presentes.

Al llegar al pueblo de Seshu, llamado Tarimela, cogimos el rickshaw, conducido por uno de sus familiares, que nos llevó a su casa, donde toda su familia nos esperaba con los brazos abiertos - y con un plato de un snack picante muy consumido en esta zona de la India y que se acompaña de un dulce típico también para aliviar el escozor de la lengua después de su consumo. 

Acto seguido volvimos al rickshaw y, ante la atenta mirada de muchísima gente que se disponía a subir a un templo, subimos nosotros también. El templo se llama Chennakesava Swamy y, a pesar de no ser muy alto, ofrece unas vistas espectaculares a las ya famosas puestas de sol en la India. Entre las espectaculares vistas y la amabilidad de toda la gente que subía al templo con nosotros, esa fue una experiencia increíble, digna de ser repetida y de no ser olvidada jamás.

En cuanto habíamos bajado del templo, fuimos a casa de Krishna, otro de mis alumnos, y conocimos a su también encantadora familia. Todos nos dieron la bienvenida en el porche delantero de su casa y se dispusieron a fotografiarse con nosotros. 

Finalmente, volvimos a casa de Seshu, donde un delicioso (y picante) plato de pappu (lentejas o dal) nos esperaba para ser consumido inmediatamente junto con arroz. La comida estuvo deliciosa y la compañía fue prácticamente inmejorable. Después de haber comido y de habernos echado unas cuantas risas todos juntos, salimos al porche para ser, de nuevo, fotografiados, esta vez con la maravillosa familia y los amigos de Seshu. 

Para acabar el día, cogimos de nuevo el rickshaw y el autobús y volvimos a nuestra realidad, a Anantapur, no sin antes llorar de nuevo de la risa en el bus, de compartir las sensaciones de ese agradable día y de agradecer a Seshu todo lo que él y su familia habían hecho por nosotros ese día. Muchas gracias, Seshu, por hacer que ese día fuera inolvidable, por acompañarnos en cada una de nuestras vivencias en tu pueblo, por tratarnos tan bien, por la deliciosa comida y por todo lo que hizo que ese día en tu pueblo se vuelva a España con cada uno de nosotros. Te aseguro que no lo olvidaremos nunca. 


Català / Catalan:


Una visita d'un dia a Tarimela pel Festival Tholi Ekadasi.

Per a Seshu, amb tot el meu afecte i agraïment. 
Gràcies per aquest meravellós i agradable dia.

Abans de començar a escriure sobre algunes de les aventures que han tingut lloc a l'Índia recentment, m'agradaria demanar disculpes per no haver escrit res aquí en gairebé dos mesos. La veritat és que el meu dia a dia està tan ple, que l'última cosa que em ve de gust en arribar a la meva habitació és seguir escrivint - sigui en el meu bloc, en el meu quadern de viatge o en qualsevol altre lloc. Sé que hi ha gent que revisa el meu bloc cada dia, esperant trobar nova informació, i el que descobreix és la mateixa informació de fa dos mesos, morta d'avorriment ja, ocupant la primera posició en la meva llista de publicacions. Em nego a comprometre'm a publicar alguna cosa nova cada dia perquè sé que no podré complir-ho, però prometo actualitzar el meu bloc el més aviat possible, tant per vosaltres (sé que teniu ganes de saber de mi) com per a mi mateixa, per no tenir massa informació per incloure en els pròxims mesos. Crec que el millor és portar aquest bloc al dia, ja que ara tinc massa publicacions pendents. A veure si ho aconsegueixo ...

Continuo, idò, amb la informació d'una altra de les meves aventures a l'Índia, una aventura que va tenir lloc dia 27 de juliol i que va ocórrer ni més ni menys que a casa d'un dels meus alumnes, Seshu. L'aventura va començar amb el meu primer trajecte amb autobús a l'Índia - un autobús més vell que nou, amb gent que havia de viatjar de peu, òxid en qualsevol racó que fos de metall i amb seients estripats per l'ús. Tot i ser un trajecte mogudet, amb salts cada dos per tres pel mal estat de l'asfalt a les carreteres i als camins, i molt de renou (ja fos pel clàxon del propi bus o el de qualsevol altre cotxe, moto o rickshaw que hi hagués pel carrer), el trajecte en bus va resultar ser una experiència d'allò més divertida, amb rialles incloses, que no va deixar indiferent a cap dels presents.

En arribar al poble de Seshu, anomenat Tarimela, vam agafar el rickshaw, conduït per un dels seus familiars, que ens va portar a casa seva, on tota la seva família ens esperava amb els braços oberts - i amb un plat d'un snack picant molt consumit en aquesta zona de l'Índia i que s'acompanya d'un dolç típic també per alleujar la coïssor de la llengua després del seu consum.

Tot seguit vam tornar al rickshaw i, davant l'atenta mirada de moltíssima gent que es disposava a pujar a un temple, vam pujar nosaltres també. El temple es diu Chennakesava Swamy i, tot i no ser molt alt, ofereix unes vistes espectaculars a les ja famoses postes de sol a l'Índia. Entre les espectaculars vistes i l'amabilitat de tota la gent que pujava al temple amb nosaltres, aquesta va ser una experiència increïble, digna de ser repetida i de no ser oblidada mai.

Quan havíem baixat del temple, vam anar a casa de Krishna, un altre dels meus alumnes, i vam conèixer a la seva també encantadora família. Tots ens van donar la benvinguda al porxo davanter de casa i es van disposar a fotografiar-se amb nosaltres.

Finalment, vam tornar a casa de Seshu, on un deliciós (i picant) plat de pappu (llenties o dal) ens esperava per ser consumit immediatament juntament amb arròs. El menjar va ser deliciós i la companyia va ser pràcticament immillorable. Després d'haver menjat i d'haver rigut tots junts, vam sortir al porxo per ser, de nou, fotografiats, aquest cop amb la meravellosa família i els amics de Seshu.

Per acabar el dia, vam agafar de nou el rickshaw i l'autobús i vam tornar a la nostra realitat, a Anantapur, no sense abans plorar de nou de riure al bus, de compartir les sensacions d'aquest agradable dia i d'agrair a Seshu tot el que ell i la seva família havien fet per nosaltres aquest dia. Moltes gràcies, Seshu, per fer que aquest dia fos inoblidable, per acompanyar-nos en cadascuna de les nostres vivències al teu poble, per tractar-nos tan bé, pel deliciós menjar i per tot el que va fer que aquest dia al teu poble torni a Espanya amb cada un de nosaltres. T'asseguro que no ho oblidarem mai.


In the bus.
En el bus.
Dins el bus.


Seshu and his niece.
Seshu y su sobrina.
Seshu i la seva neboda.







Going to Chennakesava Swamy Temple.
Yendo al templo de Chennakesava Swamy
Anant al temple de Chennakesava Swamy.


Going to Chennakesava Swamy Temple.
Yendo al templo de Chennakesava Swamy
Anant al temple de Chennakesava Swamy.


Going to Chennakesava Swamy Temple.
Yendo al templo de Chennakesava Swamy
Anant al temple de Chennakesava Swamy.


Going to Chennakesava Swamy Temple.
Yendo al templo de Chennakesava Swamy
Anant al temple de Chennakesava Swamy.


Tarimela seen from Chennakesava Swamy Temple.
Tarimela vista desde el templo Chennakesava Swamy.
Tarimela vista des del temple Chennakesava Swamy.




My student and friend Jyothi and some other guys at the top of the temple.
Mi alumno y amigo Jyothi y algunos otros chicos en la cima del templo.
El meu alumne i amic Jyothi amb altres al·lots al cim del temple.








Seshu and his family.
Seshu y su familia.
Seshu i la seva família.







With the other students and teachers who came to this trip.
Con los otros alumnos y las demás profesoras que vinieron a esta excursión.
Amb la resta d'alumnes i professores que van venir a aquesta excursió.





Krishna's family.
La familia de Krishna.
La família de Krishna.

2 comments:

  1. QUE EXPERIENCIA XESCA, DE CORAZON DISFRUTA CADA INSTANTE, SEGUNDO Y NO TE PREOCUPES DE ESCRIBIR, CADA VIVENCIA LA VIVES TAN INTENSAMENTE QUE EN CUALQUIER MOMENTO PODRAS ESCRIBIR,. SOLO SE DECIRTE DISFRUTAAAAAAA QL VOLVER TE RAPATARE PARA QUE NOS CUENTESSSSSS.

    ReplyDelete
  2. Hola Xisca!! Estic súper contenta de que me deixis comentaris per aquí!! Pots estar segura de que disfrut de cada instant a aquest meravellós país de contrasts. En tornar me pots raptar totes ses vegades que vulguis, que estaré encantada de compartir les meves experiències amb tu. Un beso!

    ReplyDelete